La subcomisión de Ambiente y Territorio de Villa Cerro Azul permanece en estado de alerta ante la denuncia de vecinos sobre la posible instalación de una nueva cantera a metros de Paso Blanco que no tendría autorización para realizar tareas de extractivismo.
ADON dialogó con la bióloga Virginia Sánchez Domínguez, guardaparque de la Comuna de Cerro Azul, quien aclara algunas dudas sobre la situación actual y la legalidad de esta actividad.
¿DÓNDE ESTÁ UBICADA?
Sánchez, especialista en Ecología de la Conservación, detalla que hay varias canteras que están en la zona de amortiguamiento de la Reserva Hídrica de Cerro Azul, en los límites de la localidad: ellas son “la cantera El Sauce, San Cayetano, San Francisco y esta nueva que está ubicada en el camino provincial que va a Paso Blanco, en un campo llamado El Gato”, precisa.
“La ubicación que tiene la cantera es toda una discusión porque no está ni en el ejido oficial de Villa Cerro Azul ni el ejido oficial de Agua de Oro, está en lo que se llama zona gris, es un ´ejido pretendido´ por la Comuna porque contiene la parte alta de la cuenca de la quebrada de la Higuera, que es uno de los principales aportantes al Río Chavascate. Cerro Azul pretende esa zona, aunque legalmente es de la provincia”, aclara.
¿ESCOMBRERA O CANTERA?
La bióloga advierte la diferencia entre cantera y escombrera: “En septiembre del año pasado esta empresa abrió una calle nueva para bajar lo que sería una escombrera, porque ellos dicen que lo que hacen es recoger material que ya está suelto, y para ello sí tienen autorización.”
“Sin embargo -dice Sánchez Domínguez- cuando tuvimos la oportunidad de estar ahí, vimos que había máquinas que estaban rompiendo y que probablemente estén haciendo un trabajo extractivo.”
Además, la especialista manifestó que “la gente denuncia que desde hace meses bajan camiones diariamente cargados con mucho material, y nos preguntamos ¿cuánto material puede estar suelto?”
¿QUÉ DICE LA POLICÍA AMBIENTAL?
A raíz de las denuncias formalizadas ante la Policía Ambiental, desde el organismo realizaron una inspección en febrero de este año y una constatación en junio, en la que observaron “labores de cantera abandonada y un sector dedicado a la actividad de escombrera, como así también la realización de tareas de acondicionamiento para la instalación de una cantera, no constatándose actividades de extracción de material”, según informaron desde ese organismo estatal.
Además, desde la Policía Ambiental también aclararon que esta empresa “debía abstenerse de iniciar tareas de extracción de material hasta tanto obtenga Licencia ambiental emitida por Secretaría de Ambiente”, por ese motivo “se procedió a implementar la medida de cese preventivo y precautorio de la actividad de cantera.”
Finalmente “se hizo saber a los administrados que deben abstenerse de iniciar y/o continuar las actividades constatadas y toda otra tarea en infracción a la legislación ambiental vigente hasta tanto acrediten poseer Licencia ambiental/autorización emitida por Secretaría de Ambiente, bajo apercibimiento de realizar denuncia penal”, informaron desde la Policía Ambiental.
¿CUÁL ES EL IMPACTO AMBIENTAL DE LAS CANTERAS?
Virginia Sánchez explica que “las canteras en general generan pérdida de suelo y de vegetación, ahuyentan a los animales y generan una discontinuidad en el hábitat para ellos, es una intervención muy fuerte, el suelo queda desnudo, sin refugio, sin semillero, no deja más que heridas, hay mucho riesgo para la población, pero también para los animales y las plantas.”
Además, “los vecinos ya saben y viven el riesgo de las explosiones, el polvo en suspensión, la peligrosidad de los camiones, la gente convive con eso, eso determina la calidad de vida”, agrega.
“Lo más preocupante -dice Virginia Sánchez- es la impermeabilización de la cuenca, que se destruyan las plantas que acumulan y generan el agua. Si uno saca el bosque y la vegetación, esa zona se impermeabiliza y el agua no llega al río en tiempo y forma. También puede generar inundaciones si el agua corre libremente y no hay nada que la retenga y la vaya liberando paulatinamente para formar el arroyo Higuera que alimenta el río Chavascate, del cual los vecinos de Agua de Oro, El Manzano y Cerro Azul tomamos el agua.”
Lo que más alarma a la Subcomisión de Ambiente de Villa Cerro Azul es que “si la actividad de esta cantera continúa, el daño ambiental será muy grave y afectará directamente al cauce del Río Chavascate, ya que se encuentra en la zona alta de la cuenca hídrica. La continua frecuencia de camiones por las calles de nuestros pueblos amenazan, no sólo la tranquilidad, sino también la salud comunitaria”, detallaron en un comunicado que distribuyeron a través de las redes sociales.
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