El Gobierno decretó el Estado de Alerta Ambiental en toda la provincia, medida oficializada este martes mediante la Resolución 275 del Ministerio de Seguridad, publicada en el Boletín Oficial. La alerta, vigente desde el 24 de mayo hasta el 31 de diciembre, busca prevenir incendios forestales y rurales.
La disposición prohíbe encender cualquier tipo de fuego y realizar actividades que puedan causar incendios en tierras públicas de la provincia. Además, la Secretaría de Comunicación y Vinculación Comunitaria del Ministerio de Vinculación Comunitaria deberá difundir ampliamente esta medida para asegurar el conocimiento de la población.
Según la Secretaría de Gestión de Riesgo Climático, Catástrofes y Protección Civil, durante los meses de otoño e invierno, las condiciones de sequía se agravan por heladas tempranas y olas de calor, especialmente en zonas serranas y agroganaderas. Estos factores aumentan significativamente el riesgo de incendios, que no solo ponen en peligro vidas humanas, sino también causan severos daños ambientales y económicos.
La normativa señala que los incendios pueden devastar la producción agrícola, afectar el turismo y destruir vastas áreas naturales, deteriorando la flora y fauna, los lagos, y provocando la desertificación y erosión del suelo. Por ello, la resolución subraya la necesidad de tomar medidas preventivas urgentes.
“Es responsabilidad del Ministerio de Seguridad ejecutar el Plan Provincial de Manejo del Fuego, implementando todas las acciones necesarias para prevenir y combatir incendios en el territorio provincial, así como declarar alertas ambientales cuando sea necesario”, concluye la resolución.
Esta medida busca proteger a la provincia de las devastadoras consecuencias de los incendios, reforzando la importancia de la prevención y la respuesta rápida ante cualquier indicio de fuego.